“Canción de Navidad”, de Charles Dickens

«¡Que Dios nos bendiga a todos!»

Canción de Navidad publicado en 1843, es el más famoso de los relatos navideños de Charles Dickens. Nos acerca a la historia de Ebenezer Scrooge, un viejo avaro y egoísta, que es visitado en Nochebuena por el espectro de Marley, su antiguo socio, que le advierte que todavía tiene oportunidad, si cambia de vida, de escapar de su cruel destino.

«–Se exige a cada hombre –contestó el espectro– que su espíritu conviva con sus semejantes y que viaje a lo largo y a lo ancho de este mundo; y, si ese espíritu no lo hace en vida, está obligado a hacerlo después de la muerte. Se le condena a vagar errante por el mundo (¡ay, pobre de mí!) y a presenciar lo que no puede compartir, pero que, de haberlo compartido cuando vivía, le habría hecho alcanzar la felicidad.»

Cuento de Navidad

El espíritu de Marley le anuncia la llegada de tres fantasmas, que le mostrarán una serie de visiones del pasado, del presente y del futuro. Gracias a esta experiencia, el «viejo y codicioso pecador» Scrooge experimenta una extraordinaria transformación y se despierta en la mañana de Navidad como un hombre totalmente nuevo.

El relato ha gozado de un enorme éxito desde su publicación y no ha dejado de reeditarse desde entonces. Ha sido adaptado, en numerosas ocasiones, al teatro, al cine y a la televisión.

Tráiler de la versión de Robert Zemeckis, 2009

Ebenezer Scrooge (Jim Carrey) es un personaje malhumorado y gruñón que trata con desprecio y malos modales a su fiel empleado Bob Cratchit (Gary Oldman) y a su alegre sobrino (Colin Firth). Pero, cuando el espíritu de las Navidades pasadas, presentes y futuras lo arrastra a un viaje durante el cual descubre verdades que siempre se ha negado a ver, el corazón del viejo avaro se ilumina y se da cuenta de que debe actuar inmediatamente para contrarrestar tantos años de egoísmo y rencor. Adaptación del clásico de Charles Dickens, que usa la misma técnica de animación que «Polar Express». (FILMAFFINITY

Un relato lleno de ternura y de valores universales, que transmite sentimientos positivos, y capaz de alentar buenos sentimientos. Un relato muy recomendable, y no sólo para los lectores más jóvenes. Para leer especialmente en Navidad, pero también en cualquier época del año.

He pretendido que, en este relato fantástico, los espectros nazcan de una Idea que no ponga malhumorado a los lectores consigo mismos, ni con otras personas, ni con la época navideña, ni conmigo. Desearía que este libro hechizase amablemente sus hogares y que nadie quisiera abandonar su lectura.

Su fiel amigo y servidor,

Charles Dickens

Diciembre de 1843

 

La belleza, la verdad benéfica del relato no consisten en el mecanismo de la intriga, en el probable arrepentimiento de Scrooge; emanan de esta amplio fuego de verdadera alegría que fue el corazón de Dickens.
Chesterton

CHARLES DICKENS

Charles Dickens

Charles Dickens

Portsmouth, (1812-1870). Charles Dickens, periodista, dramaturgo y novelista, conoció desde niño las duras condiciones de vida de las clases humildes, debido a las deudas contraídas por su padre. A la denuncia de estas condiciones dedicó gran parte de su obra. Tras unos años realizando múltiples trabajos, consiguió finalmente vivir de sus escritos, primero redactando crónicas de tribunales y, más tarde, como periodista parlamentario. La publicación por entregas en los periódicos de, prácticamente, todas sus novelas, creó una relación especial con su público, sobre el cual llegó a ejercer una importante influencia. Tras viajar por Europa y Estados Unidos, regresó a Reino Unido, donde dedicó sus últimos años a disfrutar del éxito de sus obras ofreciendo conferencias por todo el país.

SINOPSIS

El protagonista es el señor Ebenezer Scrooge, un hombre avaro y tacaño que no celebra la fiesta de Navidad a causa de su solitaria vida y su adicción al trabajo. No le importan los demás, lo único que le importan son los negocios y ganar dinero. Una noche, en víspera de Navidad, Scrooge recibe la visita de un fantasma que resulta ser el de su mejor amigo y socio Jacob Marley, que muere siete años antes del inicio de la historia. El espectro le cuenta que, por haber sido avaro en vida, toda su maldad se ha convertido en una larga y pesada cadena que debe arrastrar por toda la eternidad. Le anuncia a Scrooge que ya ha superado el conjunto de sus maldades, por lo tanto, cuando muera tendrá que llevar una cadena mucho más larga y pesada. Entonces le anuncia la visita de tres espíritus de la Navidad, que le darán la última oportunidad de salvarse.

FRAGMENTO DE LA NOVELA

«¡Ah, pero qué tacaño, cicatero, estrujador, codicioso, rapiñador, avaro, mezquino y viejo pecador era Scrooge! Duro y cortante como un pedernal del que ningún acero pudo sacar jamás una chispa generosa; taciturno, receloso y solitario como una ostra. Su frialdad interior helaba sus viejas facciones, afilaba su puntiaguda nariz, marchitaba sus mejillas, envaraba su forma de andar, enrojecía sus ojos y amorataba sus labios; y hacía que, al hablar, su voz fuera seca y chirriante. Una gélida escarcha se había posado en su cabeza, en sus cejas y en su barbilla hirsuta. Siempre llevaba consigo su temperatura glacial; congelaba su oficina en los días más calurosos, y no la deshelaba ni un grado en Navidad.

El frío y el calor externos ejercían poca influencia sobre Scrooge. Ni el tórrido calor le caldeaba, ni el tiempo invernal le resfriaba. No había viento que soplara más crudamente que él, ni nevada que cayera con peores intenciones que las suyas, ni pedrisco menos propicio a la compasión.»