“Sidi”, de Arturo Pérez-Reverte

    «Campidoctor, lo llamaban a veces. Dueño del campo, o campeador. Amado por unos y envidiado, temido y detestado por otros, había tomado como lema el de un emperador romano, sugerido por un abad amigo de su familia: Oderint dum metuant. Que me odien, pero que me teman. Estaba escrito en su escudo, en latín»

Sidi es la última novela del escritor español Arturo Pérez-Reverte. En ella nos trastada a la peligrosa frontera del Duero del siglo XI y nos narra, mezclando historia, imaginación y leyenda, los primeros meses de destierro del Cid, cuando todavía no era famoso.

El escritor de Cartagena ha señalado que le interesan especialmente los primeros meses de destierro del Cid Campeador, cuando no pelea por ninguna bandera, sino solamente para ganarse el pan de él y de los suyos porque es cuando nace el héroe, cuando se forja la leyenda.

Pero Sidi no es sólo una apasionante novela de aventuras, puede considerarse también un auténtico manual sobre el liderazgo. Ruy Díaz sabía manejar a sus guerreros, hombres rudos y difíciles, intelectualmente sencillos, pero muy complejos en cuanto a actitudes y a instintos, ha afirmado su autor. Sabía hacer que le respetaran y le siguieran, incluso aunque eso supusiese la muerte o la desgracia.

        «Jamás, desde que guerreaba, había ordenado a un hombre algo que no fuera capaz de hacer por sí mismo. Eran sus reglas. Dormía donde todos, comía lo que todos, cargaba con su impedimenta como todos. Y combatía igual que ellos, siempre en el mayor peligro, socorriéndolos en la lucha como lo socorrían a él. Aquello era punto de honra. Nunca dejaba a uno de los suyos solo entre enemigos, ni nunca atrás mientras estuviera vivo. Por eso sus hombres lo seguían de aquel modo, y la mayor parte lo haría hasta la boca misma del infierno».

Estamos ante una historia, basada en hechos y personajes reales, en la que el autor de Alatriste introduce situaciones y personajes de su invención que enriquecen y dan más fuerza a la trama. El resultado es un magnífica novela, bien escrita y documentada, que te atrapa desde la primera página. Absolutamente recomendable.

LEER UN FRAGMENTO DEL LIBRO

    «Sidi es un relato de ficción donde, con la libertad del novelista, combino historia, leyenda e imaginación. Episodios reales como el destierro del Cid y batallas como las de Almenar y Pinar de Tébar se alternan o funden entre sí según las necesidades de la narración. Eso ocurre también con los personajes históricos y los inventados. Hay muchos Ruy Díaz en la tradición española, y éste es el mío.»

Pérez-Reverte

SINOPSIS

Sidi es una historia de exilio y frontera, de lucha por sobrevivir en un territorio hostil, indeciso y de fuerzas encontradas. Narra la aventura de un guerrero que, obligado al destierro, cabalga para buscarse la vida con una hueste que lo respeta y lo sigue. Su carácter y sus hechos de armas lo convertirán en una auténtica leyenda viva.

    «El arte del mando era tratar con la naturaleza humana, y él había dedicado su vida a aprenderlo. Colgó la espada del arzón, palmeó el cuello cálido del animal y echó un vistazo alrededor: sonidos metálicos, resollar de monturas, conversaciones en voz baja. Aquellos hombres olían a estiércol de caballo, cuero, aceite de armas, sudor y humo de leña. Rudos en las formas, extraordinariamente complejos en instintos e intuiciones, eran guerreros y nunca habían pretendido ser otra cosa. Resignados ante el azar, fatalistas sobre la vida y la muerte, obedecían de modo natural sin que la imaginación les jugara malas pasadas. Rostros curtidos de viento, frío y sol, arrugas en torno a los ojos incluso entre los más jóvenes, manos encallecidas de empuñar armas y pelear. Jinetes que se persignaban antes de entrar en combate y vendían su vida o muerte por ganarse el pan. Profesionales de la frontera, sabían luchar con crueldad y morir con sencillez. No eran malos hombres, concluyó. Ni tampoco ajenos a la compasión. Sólo gente dura en un mundo duro.»

ARTURO PÉREZ-REVERTE

© Victoria Iglesias

Nació en Cartagena en 1951. Es miembro de la Real Academia Española. Elegido el 23 de enero de 2003, tomó posesión el 12 de junio de 2003 con el discurso titulado El habla de un bravo del siglo XVII.

El escritor Arturo Pérez-Reverte, licenciado en Periodismo, es doctor honoris causa por la Universidad Politécnica de Cartagena. Ha sido distinguido con la Medalla de la Academia de Marina Francesa y con la Gran Cruz del Mérito Naval de España; es caballero de la Orden de las Letras y las Artes de Francia, y de la Orden Nacional del Mérito del Gobierno francés. Es miembro correspondiente de la Academia Argentina del Lunfardo.

Fue reportero de guerra durante veintiún años. Con más de veinte millones de lectores en todo el mundo, desde 1994 se dedica por completo a la escritura de novelas y artículos. Su obra ha sido traducida a cuarenta y tres idiomas y algunos de sus títulos de más éxito, como la serie dedicada al  capitán Alatriste han sido adaptados al cine y a la televisión. Hasta la fecha cuenta con siete películas y dos series de televisión realizadas sobre sus trabajos de ficción.

OTROS FRAGMENTOS DE LA NOVELA

«Comprendían los moros, al fin, y se postraban echándose bajo el caballo de Ruy Díaz, voceando en su algarabía.
    Sidi, Sidi, –clamaban.
    Reía Diego Ordóñez satisfecho, brutal, quitándose la sangre de la cara con el dorso de una mano.
   –Te llaman señor, Ruy. ¿Los oyes?… Te llaman señor.»
   […]
    «Eso era exacto. Su nombre ya sonaba legendario, y lo sabía. No sólo por ser el único que, humilde infanzón castellano, se había atrevido a exigir juramento a un rey, sino porque batallaba desde los quince años y nadie tenía un historial de armas como el suyo: batalla de Graus contra los aragoneses, campaña contra los moros de Zaragoza, combate singular en Calahorra contra el caballero navarro Jimeno Garcés, combate singular en Medinaceli contra el campeón sarraceno Utman Alkadir, batallas de Golpejera y Llantada contra el ahora rey Alfonso VI, asedio de Zaragoza, asedio de Coímbra, asedio de Zamora, batalla de Cabra contra el conde García Ordóñez y sus aliados musulmanes de la taifa de Granada, algara contra los moros de Toledo… Siempre afortunado en la lid, siempre invicto. Campidoctor, lo llamaban a veces. Dueño del campo, o campeador. Amado por unos y envidiado, temido y detestado por otros, sugerido por un abad amigo de su familia: Oderint dum metuant. Que me odien, pero que me teman. Estaba escrito en su escudo, en latín.»
     […]
    «Alzó la vista. El águila continuaba arriba. Trazaba círculos sobre el flanco derecho, lo que seguía pareciendo un signo favorable. Si vencemos hoy, se le ocurrió de improviso, haré pintar esa ave en mi escudo. En agradecimiento. Una cabeza de águila erguida y noble: el águila de Almenar.
    Se volvió hacia los que inmóviles aguardaban detrás, a caballo y lanza en alto, dirigiéndoles una larga ojeada. Su aspecto era magnífico. La brisa agitaba los pendones triangulares al extremo de las astas de fresno, apoyadas en los estribos de las recias sillas de batalla. Eran ciento cincuenta hombres idénticos a los que los habían precedido y a los que atacarían después: gente curtida, caballería bregada en la frontera. Muchos de ellos, gente de Vivar y de Burgos que lo había seguido en el destierro e iba a seguirlo ahora en el combate. Sentía Ruy Díaz, al observarlos, la áspera fraternidad de los hombres de guerra. Un vago y común orgullo forjado fatiga tras fatiga, con lo que les había ocurrido en la vida y lo que les iba a ocurrir ese día.»

 

“Falcó”, de Javier Pérez-Reverte

«En tiempos como aquéllos, ser lobo era la única garantía. Y no siempre.»

Falcó, aparecida recientemente, es la nueva novela de Arturo Pérez-Reverte. Una novela de intriga, que transcurre en la tormentosa Europa de los años 30 y 40 del pasado siglo y que cuenta con un nuevo personaje, muy revertiano, Lorenzo Falcó, un tipo sin ideología, ex traficante de armas, seductor, asesino por oficio, y que por circunstancias de la vida trabaja para los servicios secretos franquistas durante la Guerra Civil Española.

falcolanovela

   «Falcó provenía de una buena familia andaluza vinculada a las bodegas, al vino y a su exportación a Inglaterra. Los modales y la educación adquiridos en la infancia le habían ido bien más tarde, cuando una juventud poco ejemplar, una carrera militar truncada y una vida vagabunda y aventurera pusieron a prueba otros resortes de su carácter. Ahora tenía treinta y siete años y una densa biografía a la espalda: América, Europa, España. La guerra. Trenes nocturnos, fronteras cruzadas bajo la nieve o la lluvia, hoteles internacionales, calles oscuras e inquietantes, abrazos clandestinos […] Para Falcó, palabras como patria, amor o futuro no tenían ningún sentido. Era un hombre del momento, entrenado para serlo. Un lobo en la sombra. Ávido y peligroso.»

Falcó no es un libro sobre la contienda civil española, aunque ésta aparece como telón de fondo y tiene cierta relevancia en la trama de la novela. Es una historia, ha reconocido su autor, que tenía desde hace mucho tiempo en su cabeza y con cuya escritura ha disfrutado mucho. Pérez-Reverte ha dejado semiabierto el final y ha afirmado que puede que escriba una segunda novela con este mismo personaje.

En Falcó se mezclan realidad y fantasía en las dosis adecuadas. El resultado es una novela apasionante, bien escrita, entretenida y fácil de leer. Muy recomendable.

«Arturo Pérez-Reverte sabe cómo retener al lector a cada vuelta de página.»

The New York Times Book Review

    Empezar a leer

SINOPSIS

«El mundo de Falcó era otro, y allí los bandos estaban perfectamente definidos: de una parte él, y de la otra todos los demás.»

La Europa turbulenta de los años treinta y cuarenta del siglo XX es el escenario de las andanzas de Lorenzo Falcó, ex contrabandista de armas, espía sin escrúpulos, agente de los servicios de inteligencia. Durante el otoño de 1936, mientras la frontera entre amigos y enemigos se reduce a una línea imprecisa y peligrosa, Falcó recibe el encargo de infiltrarse en una difícil misión que podría cambiar el curso de la historia de España. Un hombre y dos mujeres –—los hermanos Montero y Eva Rengel—– serán sus compañeros de aventura y tal vez sus víctimas, en un tiempo en el que la vida se escribe a golpe de traiciones y nada es lo que parece.

Pérez-Reverte entrelaza magistralmente realidad y ficción en esta historia protagonizada por un nuevo y fascinante personaje, comparable a los más destacados espías y aventureros de la literatura. Violencia, tramas de poder, suspense, lealtad y pasión conforman esta extraordinaria novela de lectura adictiva.

ARTURO PÉREZ-REVERTE

© Victoria Iglesias

                       © Victoria Iglesias

Arturo Pérez-Reverte nació en Cartagena, España, en noviembre de 1951. Escritor y periodista, es un autor de gran popularidad gracias a sus novelas en las que suele mezclar misterio, acción, aventuras e historia.

Como periodista, Reverte inició su carrera en el diario Pueblo, en el que permaneció durante doce años hasta que entró a formar parte de los servicios informativos de RTVE. Fue allí donde comenzó su labor como corresponsal de guerra, cubriendo durante más de diez años los peores conflictos armados en el mundo. Sus experiencias en lugares como Eritrea, Chipre, Chad, Líbano o, sobre todo, en la Antigua Yugoslavia -cuya cobertura informativa le valió el Premio Príncipe de Asturias de Periodismo-, le valieron para escribir su libro Territorio Comanche.

En 1986, Reverte publicó su primera novela, El maestro de esgrima, en la que se podía apreciar alguna de sus posteriores constantes: la pasión por la historia de España y por el clásico folletín de aventuras.

Con La tabla de Flandes, El Club Dumas y La sombra del águila, sus posteriores novelas, Reverte consiguió situarse en lo más alto de las listas de ventas. De ese modo, en 1994, coincidiendo con la publicación de Territorio Comanche, decidió dejar su puesto en RTVE para dedicarse en exclusiva a la literatura, manteniendo, eso sí, una columna de opinión en El Semanal.

Sin duda, la aparición de sus novelas protagonizadas por el Capitán Alatriste le supuso un nuevo éxito a nivel popular que además se vio refrendado por un reconocimiento desde el mundo literario que le valió ocupar el sillón de la T en la Real Academia de la Lengua Española.

Varias de sus novelas han sido adaptadas al cine, como Territorio Comanche, El maestro de esgrima, La tabla de Flandes, El Club Dumas (como La novena puerta) o Alatriste; en estos momentos se está negociando la adaptación a serie de televisión y a largometraje de La reina del Sur.

Pérez Reverte ha recibido diversos premios y galardones como el Príncipe de Asturias de Periodismo, el Goya al mejor guión adaptado, el Jean Monnet o la Orden de Caballero de las Artes y las Letras que otorga el gobierno francés, entre otros.

Algunas de sus últimas novelas, como El Asedio y Un día de cólera, se han centrado en la invasión de España por parte de las tropas napoleónicas y la Guerra de Independencia Española. Tras una vuelta a la crónica urbana con El francotirador paciente, Reverte se centró de nuevo en la novela histórica y los libros con Hombres buenos.

El pequeño hoplita, publicado en 2010, fue su primera incursión en el mundo de la literatura infantil.

«La única patria que debe importar al hombre lúcido es una biblioteca.»
Arturo Pérez-Reverte 

FRAGMENTO DE LA NOVELA

   «Quizá todo eso, se dijo Falcó, marcaba la diferencia entre dos Españas. Entre dos barbaries paralelas. Ni siquiera se trataba de un asunto de coraje; materia de la que, de eso no cabía la menor duda, ambos bandos estaban provistos. Lo que se daba del otro lado era una planificada represión bajo mando único, un exterminio sistemático de cuanto oliese a democracia, libertad y ateísmo, con la idea de una nación unida, religiosa y fuerte por encima de todo. Por eso en Salamanca empezaba a hablarse de Cruzada: una guerra total hecha por militares profesionales que usaban el terror y la sangre como arma definitiva. Y mientras, lo que había por parte de la República era un disparate de improvisación, oportunismo y demagogia, con las cárceles abiertas el 18 de julio arrojando chusma a las calles —convertida en milicianos que se gastaban en juergas y mujeres lo que robaban asesinando a mansalva—, y el pueblo armado, soberano en el caos, ajustando cuentas; un odio homicida no sólo hacia el ejército de Franco, sino también hacia los miembros del propio bando, partidos y facciones enfrentadas entre sí, indecisos entre ganar la guerra o hacer la revolución, incapaces de coordinar un esfuerzo común; fuera del control de unos gobernantes y políticos ajenos a la realidad, divididos, impotentes e incapaces. Por eso ganarían los otros, concluyó ecuánime Falcó. Los fachistas, como decía la miliciana. Carecían de escrúpulos democráticos, eran los más criminalmente disciplinados y los más fuertes. Iban a ganar, sin duda, por mucho que tardara aquello. Y él esperaba seguir vivo para comprobarlo. Cuando todo acabara iban a faltar tumbas.»

   

“La guerra civil contada a los jóvenes”, de Javier Pérez-Reverte, ilustrado por Fernando Vicente

«Todas las guerras son malas, pero la guerra civil es la peor de todas»

La guerra civil contada a los jóvenes es el último libro publicado por Javier Pérez-Reverte.

El escritor de Cartagena considera que la Guerra Civil española no está bien contada en los libros de texto. Por eso, en esta obra, trata de recordar a las nuevas generaciones que una tragedia como ésta se dio aquí, en nuestro país. Que nuestros padres y nuestros abuelos fueron protagonistas de esa guerra y que su lección debería valernos para que no se repitiera nunca más.

capitulo-17Laretagua_fmt

             Ilustración de Fernando Vicente

Porque «si a un joven no le das historia, lo estás dejando huérfano de memoria y, sin memoria, no tiene ninguna posibilidad de comprender un país tan complejo como España», ha asegurado su autor.

  «Numerosos españoles se vieron obligados a tomar partido por un bando o por otro. Algunos lo hicieron de forma voluntaria, dispuestos a combatir porque su manera de pensar coincidía con la de los militares sublevados o con la del gobierno legítimo, y otros sencillamente se vieron obligados por las circunstancias, por el lugar en el que se encontraban al estallar el conflicto, razones familiares o sociales. Hubo familias divididas y amigos enfrentados. Incluso personas contrarias a la violencia se vieron obligadas a combatir, alistadas a la fuerza en uno u otro bando. Éstos fueron llamados “nacional” o “facista” en el caso de los sublevados y “republicano” o “rojo” en el de los defensores del gobierno legítimo».

La guerra civil contada a los jóvenes es un libro directo, escrito con un lenguaje comprensible. No pretende sustituir a los libros de historia, sólo ser una especie de puerta que permita acercarse a otros aspectos más profundos y concretos. Consta de 30 capítulos, muy breves, acompañados por fantásticas ilustraciones de Fernando Vicente.

SINOPSIS

La Guerra Civil española contada de forma escueta, objetiva y rigurosa, sin clichés partidarios ni etiquetas fáciles, en textos de Arturo Pérez-Reverte e ilustrada de forma espléndida por Fernando Vicente.

laguerracivilperezreverte

   «Todas las guerras son malas, pero la guerra civil es la peor de todas, pues enfrenta al amigo con el amigo, al vecino con el vecino, al hermano contra el hermano. Hace casi ochenta años, entre 1936 y 1939, en tiempos de nuestros abuelos y bisabuelos, una espantosa guerra civil tuvo lugar en España. Causó miles de muertos, destruyó hogares, arruinó el país y llevó a mucha gente al exilio. Para evitar que tan desoladora tragedia vuelva a repetirse nunca, es conveniente recordar cómo ocurrió. Así, de aquella desgracia podrán extraerse conclusiones útiles sobre la paz y la convivencia que jamás se deben perder. Lecciones terribles que nunca debemos olvidar.»

Arturo Pérez-Reverte

ARTURO PÉREZ-REVERTE

Arturo Pérez-Reverte nació en Cartagena, España, en noviembre de 1951. Escritor y periodista, es un autor de gran popularidad gracias a sus novelas en las que suele mezclar misterio, acción, aventuras e historia.

© Victoria Iglesias

Como periodista, Reverte inició su carrera en el diario Pueblo, en el que permaneció durante doce años hasta que entró a formar parte de los servicios informativos de RTVE. Fue allí donde comenzó su labor como corresponsal de guerra, cubriendo durante más de diez años los peores conflictos armados en el mundo. Sus experiencias en lugares como Eritrea, Chipre, Chad, Líbano o, sobre todo, en la Antigua Yugoslavia -cuya cobertura informativa le valió el Premio Príncipe de Asturias de Periodismo-, le valieron para escribir su libro Territorio Comanche.

En 1986, Reverte publicó su primera novela, El maestro de esgrima, en la que se podía apreciar alguna de sus posteriores constantes: la pasión por la historia de España y por el clásico folletín de aventuras.

Con La tabla de Flandes, El Club Dumas y La sombra del águila, sus posteriores novelas, Reverte consiguió situarse en lo más alto de las listas de ventas. De ese modo, en 1994, coincidiendo con la publicación de Territorio Comanche, decidió dejar su puesto en RTVE para dedicarse en exclusiva a la literatura, manteniendo, eso sí, una columna de opinión en El Semanal.

Sin duda, la aparición de sus novelas protagonizadas por el Capitán Alatriste le supuso un nuevo éxito a nivel popular que además se vio refrendado por un reconocimiento desde el mundo literario que le valió ocupar el sillón de la T en la Real Academia de la Lengua Española.

Varias de sus novelas han sido adaptadas al cine, como Territorio Comanche, El maestro de esgrima, La tabla de Flandes, El Club Dumas (como La novena puerta) o Alatriste; en estos momentos se está negociando la adaptación a serie de televisión y a largometraje de La reina del Sur.

Pérez Reverte ha recibido diversos premios y galardones como el Príncipe de Asturias de Periodismo, el Goya al mejor guión adaptado, el Jean Monnet o la Orden de Caballero de las Artes y las Letras que otorga el gobierno francés, entre otros.

Algunas de sus últimas novelas, como El Asedio y Un día de cólera, se han centrado en la invasión de España por parte de las tropas napoleónicas y la Guerra de Independencia Española. Tras una vuelta a la crónica urbana con El francotirador paciente, Reverte se centró de nuevo en la novela histórica y los libros con Hombres buenos.

El pequeño hoplita, publicado en 2010, fue su primera incursión en el mundo de la literatura infantil.

FERNANDO VICENTE

fernando-vicente-FotoNació en Madrid, España, en 1963. Pintor e ilustrador de formación autodidacta, sus primeros trabajos aparecieron en la década de los ochenta en las revistas Madriz y La Luna de Madrid. Actualmente publica en el diario El País y sus diversos suplementos. Ha ganado tres premios Award of Excellence de la Society for News Design. Ha participado en importantes exposiciones en espacios como ARCA, Círculo de Bellas Artes de Madrid o en el Museo de ABC.

FRAGMENTOS DE LA NOVELA

    «La Guerra Civil Española tuvo derivaciones indirectas en la Segunda Guerra Mundial, que estalló a los pocos meses. Muchos republicanos exiliados murieron en los campos de exterminio nazis. Los soldados españoles de la División Azul, que el franquismo envió a Rusia para ayudar a las tropas alemanas, encontraron a veces frente a ellos a compatriotas: antiguos republicanos españoles que luchaban encuadrados en el ejército soviético. Un gran número de españoles tomó las armas en diversos lugares de Europa contra los nazis, tanto con las tropas regulares aliadas como con la Resistencia francesa, a la que aportaron su coraje y experiencia militar. Algunos de los blindados de las tropas que liberaron París iban tripulados por republicanos españoles y se llamaban Gernica, Belchite, Brunete o Don Quijote».

1446570179_699375_1446570670_album_normal

          Ilustración de Fernando Vicente

“Hombres buenos” de Javier Pérez-Reverte, todo un homenaje a los libros

«En tiempos de oscuridad, siempre hubo hombres buenos que lucharon por traer a sus compatriotas las luces y el progreso»

El encuentro de Pérez-Reverte con una primera edición de la Encyclopédie, existente en la Real Academia, le hace preguntarse cómo esta obra, que había estado largo tiempo en el Índice de libros prohibidos, había llegado hasta allí. Cuándo había llegado y de qué manera. De este afortunado encuentro surge la idea de Hombres buenos, la última novela del “padre” de Alatriste.

Portada de la Encyclopedie

Portada de la Encyclopédie

«El porqué de traer a la biblioteca los veintiocho volúmenes editados en París por Diderot, D´Alembert y Le Breton. Aquélla, recuerda no sin cierta emoción, incluso con sus imperfecciones, resulta la más brillante reacción moderna del intelecto humano: una compilación monumental de los más avanzados conocimientos en materia de filosofía, ciencia, arte y todas las otras disciplinas conocidas y por conocer. Una de esas obras sabias y decisivas, raras en la historia de la humanidad, que iluminan a los hombres que las leen y abren la puerta de la felicidad, la cultura y el progreso de los pueblos.»

Una historia, basada en hechos y personajes reales, en la que Pérez-Reverte también ha introducido situaciones y personajes de su invención para enriquecer la trama.

El resultado es un magnífica novela, muy bien escrita y excelentemente documentada. Una historia que desprende amor a los libros, a la cultura, y cuya lectura te atrapa desde la primera página.

El propio Arturo Pérez-Reverte ha asegurado en una reciente entrevista: Yo quiero demostrar con esta novela que es posible el diálogo, la concordia y la conversación entre dos hombres de ideas opuestas mediante el respeto, la cultura y la educación; y que justamente la intervención de los dos extremos radicales y egoístas es la que impide esta fraternidad. Esta novela es un canto a la amistad, al respeto y a la cultura como patria común, como lugar de conciliación. Son dos tipos distintos que se hacen amigos en el curso de su viaje, azaroso y peligroso, y se admiran y se cuidan. Ellos son esa España que pudo ser.”

SINOPSIS

«En España, en tiempos de oscuridad, siempre hubo hombres buenos que, orientados por la Razón, lucharon por traer a sus compatriotas las luces y el progreso. Y no faltaron quienes intentaban impedirlo.»

portada-hombres-buenos_grande

A finales del siglo XVIII, cuando dos miembros de la Real Academia Española, el bibliotecario don Hermógenes Molina y el almirante don Pedro Zárate, recibieron de sus compañeros el encargo de viajar a París para conseguir de forma casi clandestina los 28 volúmenes de la Encyclopédie de D’Alembert y Diderot, que estaba prohibida en España, nadie podía sospechar que los dos académicos iban a enfrentarse a una peligrosa sucesión de intrigas, a un viaje de incertidumbres y sobresaltos que los llevaría, por caminos infestados de bandoleros e incómodas ventas y posadas, desde el Madrid ilustrado de Carlos III al París de los cafés, los salones, las tertulias filosóficas, la vida libertina y las agitaciones políticas en vísperas de la Revolución francesa.

Basada en hechos y personajes reales, documentada con extremo rigor, conmovedora y fascinante en cada página, Hombres buenos narra la heroica aventura de quienes, orientados por las luces de la Razón, quisieron cambiar el mundo con libros, cuando el futuro arrinconaba las viejas ideas y el ansia de libertad hacía tambalearse tronos y mundos establecidos.

ARTURO PÉREZ-REVERTE

© Victoria Iglesias

                       © Victoria Iglesias

Arturo Pérez-Reverte nació en Cartagena, España, en noviembre de 1951. Escritor y periodista, es un autor de gran popularidad gracias a sus novelas en las que suele mezclar misterio, acción, aventuras e historia.

Como periodista, Reverte inició su carrera en el diario Pueblo, en el que permaneció durante doce años hasta que entró a formar parte de los servicios informativos de RTVE. Fue allí donde comenzó su labor como corresponsal de guerra, cubriendo durante más de diez años los peores conflictos armados en el mundo. Sus experiencias en lugares como Eritrea, Chipre, Chad, Líbano o, sobre todo, en la Antigua Yugoslavia -cuya cobertura informativa le valió el Premio Príncipe de Asturias de Periodismo-, le valieron para escribir su libro Territorio Comanche.

En 1986, Reverte publicó su primera novela, El maestro de esgrima, en la que se podía apreciar alguna de sus posteriores constantes: la pasión por la historia de España y por el clásico folletín de aventuras.

Con La tabla de Flandes, El Club Dumas y La sombra del águila, sus posteriores novelas, Reverte consiguió situarse en lo más alto de las listas de ventas. De ese modo, en 1994, coincidiendo con la publicación de Territorio Comanche, decidió dejar su puesto en RTVE para dedicarse en exclusiva a la literatura, manteniendo, eso sí, una columna de opinión en El Semanal.

Sin duda, la aparición de sus novelas protagonizadas por el Capitán Alatriste le supuso un nuevo éxito a nivel popular que además se vio refrendado por un reconocimiento desde el mundo literario que le valió ocupar el sillón de la T en la Real Academia de la Lengua Española.

Varias de sus novelas han sido adaptadas al cine, como Territorio Comanche, El maestro de esgrima, La tabla de Flandes, El Club Dumas (como La novena puerta) o Alatriste; en estos momentos se está negociando la adaptación a serie de televisión y a largometraje de La reina del Sur.

Pérez Reverte ha recibido diversos premios y galardones como el Príncipe de Asturias de Periodismo, el Goya al mejor guión adaptado, el Jean Monnet o la Orden de Caballero de las Artes y las Letras que otorga el gobierno francés, entre otros.

Algunas de sus últimas novelas, como El Asedio y Un día de cólera, se han centrado en la invasión de España por parte de las tropas napoleónicas y la Guerra de Independencia Española. Tras una vuelta a la crónica urbana con El francotirador paciente, Reverte se centró de nuevo en la novela histórica y los libros con Hombres buenos.

El pequeño hoplita, publicado en 2010, fue su primera incursión en el mundo de la literatura infantil.

«La única patria que debe importar al hombre lúcido es una biblioteca.»
Arturo Pérez-Reverte 

FRAGMENTOS DE LA NOVELA

   «Por la ventana de la alcoba, con sólo levantar los ojos, el bibliotecario alcanza a ver el convento de las Trinitarias, que está al extremo de la calle. Y no hay ocasión en que mire por esa ventana, concluye, que no se sienta inundado de melancolía. La rancia, deprimida e inculta nación que tanto necesita ideas que ilustren su futuro resume buena parte de sus dolencias endémicas tras aquellos muros de ladrillo. Miguel de Cervantes, el hombre que más gloria dio a las letras hispanas y universales, yace ahí mismo, en una fosa común. Sus huesos vueltos al polvo se perdieron en el tiempo. Murió pobre, abandonado de casi todos, arrojado al olvido por sus contemporáneos tras una vida desdichada, sin apenas gozar del éxito de su libro inmortal. Lo trajeron desde su modesta casa, a dos manzanas de aquí, en la esquina de la calle de Francos con la del León, sin acompañamiento ni pompa alguna, y fue enterrado en un rincón oscuro del que no se guardó memoria. Ninguneado por sus compatriotas y sólo reivindicado más tarde, cuando en el extranjero ya devoraban y reimprimían su Quijote, ni siquiera una placa o una inscripción recuerdan hoy su nombre.
[…] 
    
   ––¿Son esos libros tan valiosos como para morir por ellos? ––pregunta.
   El otro lo piensa un instante, o parece hacerlo.
   ––No es por ellos, sino por lo que tienen dentro ––responde, al cabo.
   ––Vaya… ¿Y de qué se trata?
   ––De la Razón. Lo que hará que un día no existan hombres como usted.
   Tuerce Raposo la boca, interesado a su pesar.
   ––Explíquemelo, si es rápido.
   El otro parece considerarlo sólo un momento.
  ––Dudo que lo entendiera.»