“El mercader de libros”, de Luis Zueco

     «Cada libro que veis tiene alma. El alma de quien lo escribió y el alma de quienes lo han leído y vivieron y soñaron con él. Cada vez que un libro se lee, su alma crece y se hace más fuerte.»

El mercader de libros es la última novela histórica de Luis Zueco, autor de la conocida Trilogía Medieval, compuesta por El castillo, La ciudad y El monasterio.

La novela está ambientada en los comienzos del siglo XVI, cuando la imprenta había cambiado para siempre el mundo, haciendo que los libros fuesen accesibles para una gran parte de la población. Profundamente influencia por las ideas del humanismo, la novela constituye un hermoso homenaje a los libros.

El protagonista de la historia es Thomas Babel, un joven alemán que, huyendo de su pasado, atravesará media Europa hasta acabar recalando en España, donde comenzará a trabajar para un mercader de libros con el que emprenderá la búsqueda de un misterio ejemplar cuya localización les llevará hasta Sevilla; lugar en el que se desarrolla la mayor parte de la novela.

Sevilla era en aquellos momentos la ciudad más próspera de Occidente, a su puerto llegaban las riquezas de América y en sus calles se dirimía el futuro de Europa. Entre sus murallas se creó la primera biblioteca moderna, el primer centro de saber occidental, y lo hizo bajo el mando del hijo del descubridor de América, Hernando Colón, quien reunió durante su vida esta biblioteca de casi 20.000 títulos que fue el primer intento de reunir todo el saber universal, clasificarlo y hacerlo accesible para utilizarlo a la hora de gobernar un imperio.

                                                   Biblioteca Colombina

    «Sí; ni armas, ni ejércitos, ni flotas, ni castillos, ni tierras —enumeró Hernando Colón—. Los libros son… ¿cómo explicarlo? Los libros nos permiten saber lo que piensan miles de hombres, lo que descifraron los sabios de la antigüedad, lo que descubre un genio en la otra punta del mundo. Los libros nos enseñan la historia, podemos aprenderla para no cometer los mismos errores que nuestros ancestros. Los libros nos muestran la palabra del Señor; ¿qué habría sido de nosotros sin las Sagradas Escrituras? Los libros son una mente inmensa, que abarca el saber de toda la humanidad. Sin ellos… seríamos poco más que animales. Cada generación olvidaría lo aprendido por la anterior y así una y otra vez.»

El mercader de libros me ha parecido una buena novela, bien escrita, entretenida y fácil de leer. En ella se mezclan hechos y personajes reales con otros totalmente inventados. La historia se sustenta en un gran trabajo de investigación y documentación histórica y refleja muy bien cómo era la forma de vida en la Europa de principios del siglo XVI.

Una hermosa novela, que hará las delicias de los amantes de este género literario y en especial de los amantes de los libros, ya que en ella vamos a encontrarnos con frecuentes referencias y reflexiones en torno al mundo de los libros y de las bibliotecas.

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Hoy los libros se hallan rodeados de poderosos enemigos,
que buscan arrinconarlos y, a la vez, extraer de ellos toda su alma;
pero ignoran su inmensa capacidad de resiliencia.
Ha llegado el momento de alzarse, de rebelarse.
          Y no hay mejor defensa de los libros que su lectura.
  ¡Lean, lean! ¡Sean unos rebeldes!
Luis Zueco

SINOPSIS

Todo gran viaje comienza en los libros

    «—Soy Thomas Babel, mercader de libros —dijo entonces con firmeza—. He trabajado para Luis de Coloma, nieto del secretario de los Reyes Católicos, y para don Hernando Colón, hijo del descubridor de las Indias. He participado en la reunión de Badajoz para defender los derechos de España sobre las Islas de las Especias frente a los portugueses. He sido impresor y ahora también soy mercader de libros, como os digo. Permítame, mi capitán, que le diga que aquí donde me ve, soy una persona honorable, que nací en tierra extranjera, y mi sueño es cruzar el gran océano y llevar los libros allí donde más los necesitan.»

     Año 1517. El joven Thomas atraviesa la incipiente Europa renacentista huyendo de su pasado. Son los años siguientes al descubrimiento de América y la invención de la imprenta, un periodo de profundos cambios que han supuesto el fin de la Edad Media. La curiosidad que siente por el Nuevo Mundo, cosechada en sus múltiples lecturas, le llevará hasta España, donde comenzará a trabajar con un mercader de libros.
El encargo de localizar un ejemplar envuelto en un halo misterioso le conduce hasta Sevilla, una próspera ciudad que sirve como enlace en el comercio con las Indias y que alberga, entre sus murallas, la biblioteca más importante de Occidente, creada por el hijo de Cristóbal Colón y llamada la Colombina. Será precisamente allí donde Thomas descubra que alguien ha robado el libro que él busca y, por alguna razón, tiene mucho interés en que nadie lo encuentre.

Hubo un tiempo en que los libros permitían descubrir nuevos mundos, tambalear los dogmas más sagrados y cambiar el curso de la Historia. Luis Zueco nos sumerge en los albores de la bibliofilia y nos traslada, en una perfecta unión de rigor histórico y trama trepidante, a una época en la que la palabra impresa podía ser el arma más peligrosa.

LUIS ZUECO

Luis Zueco (Borja, Zaragoza, 1979) es director de los Castillos de Grisel y de Bulbuente, dos fortalezas restauradas y habilitadas como alojamientos con encanto y para la realización de eventos. Además, es ingeniero industrial, licenciado en Historia y máster en Investigación Artística e Histórica, miembro de la Asociación Española de Amigos de los Castillos y colaborador, como experto en patrimonio y cultura, en diversos medios de comunicación.

Ha logrado un éxito internacional de crítica y público con su fascinante «Trilogía Medieval»: El castillo (Mejor Novela Histórica 2015 por la web Novelas Históricas), La ciudad y El monasterio, tres novelas que pueden leerse de manera independiente y con las que accedemos, a través de adictivas tramas de intriga ambientadas en los escenarios arquitectónicos más importantes de la época, a aspectos fundamentales de la Edad Media.

OTRO FRAGMENTO DE LA NOVELA

    «—Interesante, los libros están de moda. Desde que se ha inventado la imprenta todo ha cambiado, y más que cambiará. En la Antigüedad había pocas copias de cada libro y en cualquier momento el último ejemplar de un libro podía quemarse, o mojarse y perderse para siempre. ¡Ahora ya no!
    —¿Por qué? —Massimiliano había captado la atención de Thomas.
    —Por la imprenta, muchacho. El mayor invento de la historia.
    —¿Lo decís de verdad? —inquirió Thomas incrédulo.
    —La historia de los hombres se repite, volverán a llegar tiempos oscuros, los hombres se volverán necios, la ignorancia se apoderará de sus vidas y olvidarán su pasado. Pero entonces los libros nos salvarán. De hecho, los libros ya nos han salvado muchas veces.
    —Eso sí que no lo entiendo.
   —Los libros han cambiado el mundo en más ocasiones de las que imaginamos. Sin los libros, cada generación estaría condenada a repetir los mismos errores que sus antepasados, solo los libros nos separan de la barbarie. El día que no haya libros, tampoco habrá hombres. Pero ahora eso ya no podrá suceder, porque la imprenta los crea a miles; ¡nunca más se perderá un libro!
    —No había pensado nunca en eso… —Thomas estaba ensimismado.»